En
nuestra última entrega abordamos este tema desde un punto de vista general, es
decir, buscamos establecer elementos descriptivos del liderazgo y comparábamos
estos elementos con las actividades que diariamente desarrolla la mujer y visualizamos características que
definen al líder, establecíamos estas características como valores propios de
la mujer que asume responsabilidad, que motiva a otros y ejerce una influencia
natural en nuestra sociedad.
Usted
puede identificar el liderazgo de la mujer en la casa, en el área de estudio,
en los negocios, el trabajo, la Iglesia, en fin… donde ella esté, ahí hay un
líder en potencia. Ella puede ejercer influencia en distintas formas y con
tanta sutileza que puede convencer a los que están a su alrededor a seguirla
por sus actitudes, hechos, mirada, sonrisa, ternura, amor, disciplina, entrega,
responsabilidad, sentimientos, visión, consistencia… entre tantos elementos más
que podemos citar.
Hay
muchos libros hoy día que hablan de la mujer, de su papel como madre, esposa,
amiga, hermana y compañera. Para este artículo me estaré refiriendo al libro
que mejor describe el liderazgo de la mujer, me refiero a la Biblia. Usare
algunas referencias del antiguo testamento y otras de los tiempos de Jesús y
los apóstoles o el nuevo testamento.
La
Biblia habla de muchas mujeres, nos describe sus aportes y su liderazgo en las
sociedades donde le correspondió ejercerlo, siendo motivadora de cambios de una forma integral. De
las tantas mujeres mencionadas en los escritos Bíblicos, hay tres mujeres del
antiguo testamento que me han impresionado sobremanera, dos de ellas las puedes
ver en el Libro de Rut y la otra en el libro de Ester.
Estas mujeres combinan estos elementos básicos de un liderazgo exitoso y multiplicador, de un liderazgo
emprendedor. Ellas de manera natural se convirtieron en mujeres motivadoras que influenciaron a otros desde
lo individual hasta lo colectivo.
Su
trabajo le permitió ser reconocidas. Si usted observa bien, estas mujeres no
buscaron este reconocimiento, ellas sencillamente empezaron hacer ajustes
personales, ajuste de siervas, sin pretensión, fueron instrumento de cambio
para aquellos que estaban a su alrededor. Desde adentro, su trabajo transformó,
incluso naciones.
Veamos el primer ejemplo:
Rut 1:1-17,
nos introduce en esta bella Historia. Noemí hace un pedido a sus dos nueras, Orfa y Rut.
Sin embargo observemos la
respuesta de Rut a Noemí y descubramos el liderato de Noemí como influenció en
esta decisión.
Rut le replicó: "No me obligues a
dejarte yéndome lejos de ti, pues a donde tú vayas, iré yo; y donde tú vivas,
viviré yo; tu pueblo será mi pueblo y tu Dios será mi Dios.
Donde tú mueras, allí también quiero
morir y ser enterrada yo. Que el Señor me castigue como es debido si no es la
muerte la que nos separe." 1:16,17
a)
Noemí
no ejerció un liderazgo dictatorial, ella enseñó con su ejemplo. No obligó a
Rut a seguirla, incluso, ni se lo pidió. Rut 1:12 y 13.
b)
Los
buenos líderes explican a sus seguidores las razones básicas por las que están
tomando las decisiones y le ayudan a tener una visión de los resultados y
consecuencias de tales decisiones. Rut 1:12.
c)
Esta
mujer hablaba con el ejemplo, ¿Por qué estaba tan decidida Rut a seguirla? ¿Ya
no tenía más hijos? Era viuda y no tenía posiciones económicas. Pero vemos a
Rut decir a Noemí… “donde tú vayas, iré yo; y donde tú vivas, viviré yo”… Mujeres como Noemí hay montones en este mundo hoy día. Podemos
ver a hijos, esposos, amigos, hermanos, etc. expresar lo mismo de madres,
esposas, hermanas y amigas…
d)
Noemí compartió sus valores y creencia con su
familia.
Rut
le expresa que no solo estará con ella, sino que también servirá a su Dios y
que aceptara su pueblo…’’tu pueblo será mi pueblo y tu Dios será mi
Dios”
Rut
muestra convicción y lo aprendió de Noemí. Esta dispuesta a seguir a su líder
sin importar la circunstancias, pues confía sinceramente en ella, incluso,
quiere morir donde ella muera y vivir donde ella viva.
e)
Rut
muestra el poder de la lealtad, la unidad, el respeto, la sinceridad y la
entrega que se gana un líder que
influencia a los demás por sus valores y vocación. Noemí es un ejemplo para la
mujer de hoy. Mujeres que trabajan en su hogar con su matrimonio, sus hijos, su
preparación secular, espiritual y física. Ellas son líderes en cada área de su
vida. Necesitamos aprender a valorarlas por lo que hacen y por lo que son.
Entiendo
que si usted lee esta historia encontrará muchas otras lecciones de vida. Lecciones
que le ayudará a tomar las mejores decisiones, estimulándoles esos valores que
le ayudarán a ejercer un liderazgo de
ejemplo para aquellos que viviendo con usted observen sus acciones y al
seguirla puedan cambiar sus vidas.
En
la Iglesia me han preguntado algunas mujeres sobre su papel y su trabajo en el
pueblo de Dios, no se observan liderando los esfuerzos necesarios como para ser
consideradas líderes o mujeres que ejercen influencia.
Quiero
contarle mi respuesta a esas mujeres y como a verse en el espejo de siervas de
Dios por medio de su hijo Jesucristo ha descubierto la hermosura de liderar
dando lo mejor de sí misma para la obra de Dios.
Inicio
mi respuesta preguntándoles, ¿Con quién se está comparando hermana? ¿A qué
clase de liderazgo se refiere y como lo visualiza? ¿A qué tipo de servicio
entiende usted que Dios la ha llamado? ¿Por qué cree que es un llamado de Dios?
¿Entiende el papel de Siervo y sus implicaciones?
Muchas
veces visualizamos nuestras haciendo comparaciones, es decir, queremos ser como
X persona. Esto realmente es un arma de doble filo, pues hay mucha gente que
por la hermosura de su trabajo y liderazgo en lo que hacen son de inspiración
para los demás. Pero hay muchos modelos en nuestra sociedad que no son digno de
ser imitados.
Por
esa razón necesitamos estar claros de cuáles son nuestras motivaciones, que nos
gustaría hacer con nuestro potencial, por supuesto, si conocemos que podríamos ser
capaces de hacerlo. Pues al querer hacer
lo otros están haciendo necesitamos ser muy sincero con nosotros mismo y con
nuestra visión.
Cuando
visualiza que tipo de líder quiere ser, debería enfocarse al tipo de servicio
que está dispuesta a hacer por la sociedad a la cual pertenece, identificando las necesidades visibles y potenciales,
así como el entorno donde visualiza esos satisfactores. Por igual debe
identificar cuáles son tus motivos. Que busca de manera personal, lo que
quiere hacer. Preguntarte si tus motivos son por reconocimientos personales o por
un servicio a quien o quienes lo necesitan. Los líderes exitosos no buscaron
ser servidos, más bien buscaban servir desinteresadamente a los demás.
Contestadas
las dos primeras preguntas es importante saber si usted entiende a que servicio
Dios la ha llamado como sierva Suya. Esta respuesta cambia totalmente su visión
del liderazgo y como mujer le dará una verdadera connotación a su llamado. En la
iglesia he visto grandes mujeres de Dios ejercer un liderazgo tan fuerte y
firme que incluso hacen sentir a otros la necesidad de hacer lo mismo, contribuyendo
al crecimiento espiritual de muchas almas. Ellas son líderes de influencias,
mujeres que trabajan día a día por sus congregaciones.
Vemos
dos mujeres en la Iglesia del primer siglo quienes trabajaron a la par del
Joven Timoteo, ellas le inspiraron y le educaron para ser un siervo, un
liderazgo tan fuerte y limpio que hoy día sigue dejando huellas. Me refiero Loida su abuela y Eunice su madre. ¿Cuántas mujeres
hoy están liderando a sus hijos y nietos para que sean hombres y mujeres de
bien en el mañana? ¿Cuántas necesidades tienen hoy día las familias de que se levanten
mujeres como estas que puedan aportar a la Iglesia y a la sociedad hombres y
mujeres con un espíritu diferente?
Pablo
cuando escribe a Tito le pide que las mujeres de más experiencias enseñen a la más
Jóvenes. ¿Qué buscaba el Apóstol dentro de la Iglesia? A esas líderes que ayudarían
y que hoy día pueden ayudar al crecimiento de la Iglesia trabajando con las demás
mujeres del cuerpo de Cristo. ¿Cuál es su llamado hoy día? Hacer lo mismo que
en la Iglesia del primer siglo.
Podemos
analizar el liderazgo de la mujer desde un visión Bíblica y vamos a encontrar
que efectivamente las pruebas son contundentes y de mucho desafío para la mujer
de hoy. Así como Noemí, Loida y Eunice,
usted puede marcar la diferencia y hacer algo por el pueblo de Dios que tanto
lo necesita hoy día. Estas son mujeres inspiradoras, de las cuales hay montones
de historia en la Biblia.
Veamos
ahora a otra mujer, cuyo liderazgo cambio una nación por completo, me refiero a
Ester. Su llegada al reinado del rey Asuero fue originada porque la reina Vasti
no obedeció a un pedido de su rey, en esta historia, el rey Asuero. Ella estuvo
entre las mujeres que fueron llamadas por orden del rey para escoger una nueva
reina. Aquí entre en escena Mardoqueo quien era tío de Ester y la había criado,
pues ella era huérfana.
Ester
fue llevada a casa del rey, ella halló gracias delante los ojos de Hegai el
encargado de la casa de las mujeres. Notamos que Ester siguió las instrucciones
de su tío en este proceso, ella se dejó guiar, un ejemplo de una verdadera líder.
Relata
el capítulo dos de Ester que ella era del agrado de todos los que la veía. Otra
característica del verdadero líder, influencia. Relata la historia que cuando
Ester fue delante del rey Asuero, El la amó más que todas las doncellas que habían
comparecido ante él, (Ester 1 y 2).
El capítulo dos también nos relata cuando Mardoqueo denunció la conspiración
contra el rey Asuero, fue comunicado por la reina Ester, pero ella lo hizo en
nombre de Mardoqueo quien le había informado de los hechos. Esta historia nos
deja claro que los verdaderos líderes no se apoderan de las ideas o trabajo de
sus seguidores o de quienes los rodean. Este es otro valor distintivo del
liderazgo de la reina Ester.
El capítulo cuatro nos muestra como Ester intercede por el pueblo Judío. Ella inicia
este proceso investigando las razones por las cuales se quiere matar al pueblo,
de nuevo entra en escena Mardoqueo su tío, el es el protagonista ahora de la
historia. Una vez mas Ester nos muestra que los verdaderos líderes no actúan por
impulsos, se toman el tiempo para investigar y tomar las decisiones correctas.
Ester
también nos enseña que antes de tomar una decisión, los líderes de éxitos se
preparan, no confían en su poder de líder, confían en soluciones que le
permitan defender a sus seguidores y sus causas justas delante de las
injusticias que los rodea, Ester 4:15-17.
En
el capítulo 5 de este importante libro vemos la estrategia dentro del liderazgo
de Ester, ella no se lanza a una solución de poder, ella se lanza a mostrar la
verdad y luchar por ella. Es cuando inicia el proceso de descubrir a Amán, el hombre
quien había montado la conspiración contra el pueblo Judío.
Los
resultados del plan de Ester se observan en el capítulo 6 al 10. La inspiración
de una mujer y su liderazgo quedan hoy como historia para inspirar a otras
mujeres que como Ester puedan marcar la diferencia en el puedo de Dios y en la
sociedad en sentido general.
¿Usted
para que cree que fue llamada? Es posible que como Ester usted esta llamada a
generar cambios, a transformar vidas, a marcar las diferencias. Es un reto, estoy
convencido que usted puede. Mi madre, mi esposa y mis hijas cada día me
muestran el potencial que tiene la mujer para ser un gran líder. En la Iglesia donde me reúno veo tantas
mujeres con ese potencial de líder y es cuando me pregunto, ¿cuándo explotaran
ese potencial? Creo que cuando se den cuenta que como Ester, Loida, Eunice, Rut y Noemí,
ellas también pueden…
Dios
le ha dado un maravilloso don como mujer, tenga la visión, mire su potencial y
ponga en marcha las acciones que la llevaran al éxito, liderando acciones al servicio
de quienes más los necesitan.
Muchas
Bendiciones de Dios para su vida.
Autor: Mateo Martínez
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